Alimentación sana

 

Cuando se habla del consumo de alimentos para la subsistencia, por lo general se hace alusión a dos términos de manera indistinta: alimentación y nutrición, los cuales, aunque tienen una relación estrecha, encierran significados diferentes, como se deduce a continuación:

Alimentación: es el proceso que involucra la selección, preparación e ingestión de alimentos e incluye aspectos psicológicos, sociales y culturales.

Nutrición: es el proceso biológico por el cual el organismo transforma y asimila los alimentos ingeridos.

Teniendo claro lo anterior, es bueno recordar que una alimentación adecuada es aquella mediante la cual se le proporcionan al cuerpo los nutrientes y grupos de alimentos en las cantidades y frecuencias requeridas y según las necesidades de cada persona.

Entre los nutrientes esenciales para tener una alimentación sana están las proteínas, las grasas, los carbohidratos, las vitaminas, los minerales y el agua, los cuales detallamos a continuación, con la advertencia de que el consumo excesivo de alguno de ellos puede causar alteraciones en la salud.

Proteínas: son indispensables para el crecimiento de las células e intervienen en la formación de jugos digestivos; son fundamentales para el metabolismo, actúan como defensa contra diversas enfermedades y forman parte del tejido muscular y de la piel. Están presentes en carnes rojas, pollo, pescado, huevos, lácteos y sus derivados, y en vegetales como fríjoles, garbanzos, arvejas, lentejas, soya, entre otros.

Enfermedades relacionadas con el consumo excesivo de proteínas: alteraciones del sistema renal o la manifestación de alergias a ciertos alimentos (por ejemplo, a la proteína de la leche de vaca, al huevo, al gluten), entre otros casos.

Grasas: se conocen también como lípidos y son fuente de energía concentrada y almacenable; son indispensables para el crecimiento y para mantener saludable el sistema nervioso y la piel; ayudan a la absorción y al transporte de algunas vitaminas. Existen tres tipos de grasas: saturadas (consideradas "grasas malas" porque están relacionadas con la producción de colesterol y los problemas de circulación; insaturadas (consideradas como "grasas buenas" porque controlan el colesterol y las enfermedades cardiovasculares) y las trans (grasas semisintéticas, no aptas para la salud).

Enfermedades relacionadas con el consumo excesivo de grasas: Obesidad, dislipidemia (alteración de niveles de lípidos en sangre), pancreatitis, cálculos en la vesícula biliar, mala absorción de grasas (esteatorrea), entre otras.

Carbohidratos: también llamados glúcidos, sirven como fuente de energía para todas las actividades celulares vitales; se encuentran presentes en la papa, el arroz, las harinas, el plátano, el pan, la yuca, las galletas, entro otros productos.

Enfermedades relacionadas con el consumo excesivo de hidratos de carbono: caries dental (unido a una mala higiene bucodental), obesidad, alteración de los niveles de lípidos en sangre (triglicéridos, por un exceso de azúcares), diabetes, intolerancia a la lactosa o a la galactosa.

Vitaminas y minerales: son fundamentales para la prevención de enfermedades y para el adecuado crecimiento y funcionamiento del cuerpo; se deben ingerir diariamente. Las frutas y las verduras son la principal fuente de estos nutrientes.

Enfermedades relacionadas con el bajo consumo de vitaminas y minerales o con ingesta excesiva de las mismas: anemia (falta de hierro), bocio (falta de yodo), raquitismo en niños (falta de calcio), osteoporosis (falta de calcio), hipertensión arterial (exceso de sodio o sal común), mayor susceptibilidad al estrés (déficit de magnesio), entre otras.

Agua: es fundamental para todas las funciones vitales, teniendo en cuenta que el 65 % del cuerpo humano está compuesto por este líquido. Su ingesta es indispensable para la absorción de nutrientes; sin embargo, debe consumirse según las necesidades del cuerpo, pues una sobrehidratación tiene consecuencias negativas como la reducción de los niveles de magnesio en el organismo.

Fuente: promocionyprevencion.com. (Marzo 8, 2012). Nutrición sana. Recuperado el 21 de marzo de 2013 de http://www.promocionyprevencion.com/