Robótica e inteligencia artificial desde una perspectiva de género: Sexualidad y tecnología

Este curso se centrará en analizar desde diferentes perspectivas la relación intrínseca que se establece entre los medios de comunicación y la construcción social de la sexualidad, prestando especial atención al problema de la violencia de género y sexual. 

La población nativa digital se incorpora a la sexualidad, no desde la educación (cuestión que también sucedía en las generaciones anteriores) sino a través del empleo de la tecnología como vehículo de (des)educación sexual (este hecho sí que difiere sustancialmente de épocas anteriores). Por otro lado, el desarrollo de la robótica y de la IA está incorporando también modelos que reproducen los estereotipos de la pornografía. Prostíbulos de robots con apariencia femenina; aplicaciones informáticas que permiten controlar a las robots sexuales que se pueden comprar para uso doméstico y que incorpora la actividad sexual y el acompañamiento con programas que permiten elegir que sean sumisas o rebeldes a gusto del consumidor varón.

Para impedir la reproducción automática de la violencia en el ámbito de la sexualidad es imprescindible abrir un profundo debate ético y conceptual respecto a la tecnología sexual del futuro.

Objetivo general:

• Reflexionar acerca de la tecnología y cómo afecta a la construcción y perpetuación de estereotipos sexistas.

• Contribuir desde la Universidad a la construcción de una sociedad de futuro basada en valores de igualdad entre mujeres y hombres y de no violencia.

Objetivos específicos:

• Analizar el hecho de que todos los productos que se encuentran en el mercado que incorporan las nuevas tecnologías de robótica e IA mantienen la figura del varón como depredador, incrementando el poder de la “masculinidad”.

• Deconstruir los imaginarios patriarcales sobre la sexualidad humana.

• Visibilizar el mandato de género en las relaciones sexuales, a partir de un análisis de la tecnología que se dice neutra pero no lo es.

• Poner de manifiesto la necesidad de incorporar la perspectiva de género en el ámbito de la tecnología, tanto en la formación de especialistas, como en el diseño y la investigación.